Es un sistema en el que la unidad de refrigeración y la de condensación se encuentran en el mismo bloque.

Su mayor inconveniente es el ruido que proporciona en la habitación. Es económico pero menos estético, y existen en forma manual o con control remoto.

Para la instalación es necesario abrir un orificio en la pared o ventana. Así, la parte condensadora queda en el exterior, con el fin de evacuar el aire caliente.

Aplicaciones: En edificios ya construidos, y en los que, sólo se acondiciona una parte de ellos. Oficinas, pequeños locales y algunas viviendas.
 

De 9.000 a 24.000 BTU/hora.